Hoy nos vamos de viaje y nuestro destino es Venecia, Italia.
Un fin de semana largo en la cuidad de los canales y sus famosos paseos en gondola suena como el mejor plan. Como no sentir ese deseo de visitar esta ciudad muy conocida por su arquitectura, plazas, y callecitas. Donde el simple gusto de perderte en ellas es conocer una parte de su esencia.
Escogí el primer vuelo del viernes por la mañana con ansias y ganas de aprovechar el día. Nuestra ruta es Barcelona - Venecia.
Con la suerte de no haber tenido ningún retraso llegamos al aeropuerto de Venecia. Al desembarcar y sin tener un plan exacto que nos dijera como llegar a nuestro hotel nos enfrentamos a estas opciones: si ir por tren, en taxi tradicional, en bus, en un barco privado, o a su vez barco turístico. Todas las opciones son validas, pero hay algo que analizar antes ¿que tan cerca quieres que te dejen de tu hotel?.. recordando que en las calles de Venecia no hay coches. Pues visto esto tomamos el barco privado, el cual nos dejó en la puerta del Hotel (Carnival Palace).
Instalados en nuestra habitación y listos para comenzar nuestra aventura nos dirigimos a la Piazza de San Marco. Lo mas divertido fue que hasta llegar ahí, pasamos tantos canales y puentes como fue posible.
Realmente yo no pude parar de disparar mi cámara en ningún momento, tantos instantes que capturar, sensaciones, y la emoción de poder estar ahi nos invadían completamente.
Empezamos sin orden alguno cuando de visitar lugares se trataba, la espontaneidad y perderse fue parte del viaje en Venecia. Nuestro deseo era simplemente disfrutar del momento y de lo que nos rodeaba.
Por eso les detallo los lugares que visitamos en nuestro 4 días en Venecia:
Piazza San Marco
Basilica di San Marco
Campanile di San Marco
Palazzo Ducale
Gallerie dell’Accademia
Ponte dell’Accademia
Canal Grande
Ponte di Rialto
Chiesa di San Rocco
Scuola Grande di San Rocco
San Giorgio Maggiore
Galleria di Palazzo Cini
Basilica S. Maria Gloriosa dei Frari
Dorsoduro
Palazzo Veniér dei Leoni (Peggy Guggenheim collection)
S. Maria della Salute
Cannaregio ( sector donde quedaba nuestro hotel conocido como el barrio judío )
También hicimos un viaje a las islas de Murano y Burano, del cual les contaré en el siguiente post.
Seguramente nos faltaron mas lugares por visitar. No cabe duda alguna, pero de lo que si podemos estar de acuerdo, es una ciudad bellísima y a la cual regresaríamos.
Por otro lado la comida fue una experiencia sensacional y riquísima tanto como tomarte un cafe en una de las terrazas que están ubicadas en la piazza San Marco acompañada de música, algo que me encanto.
A la hora de comer tienes tantos lugares como sea posible, y de acuerdo a tu gusto y condiciones. Pero no te puedes perder la experiencia de comer o cenar junto al canal, una pizza, pasta o mariscos, admirando tu entorno y la compañía. Siendo así no puede acabar un viaje a Italia sin probar mi postre preferido Gelato…caminando por esas callecitas pintorescas, y con la sonrisa mas grande que te puedas imaginar.